La ventaja de no tener una multinacional de hamburguesas
Según El Gran Jefe de los Masistas, no subirían los precios de todos esos ingredientes pues estarán en parte subsidiados y sobre todo regulados hasta que se adecúe nuevamente sus precios (como ejemplo: el azúcar)
Pero algo es seguro... faltarán todos!
El índice Big Mac fue creado como una guía divertida para indicar si las monedas están en su nivel correcto de paridad con respecto a las demás divisas. Algunos pueden pensar que este índice es una frivolidad pero, además de que se han escrito libros y se han hecho varias tesis doctorales sobre él, ha sabido predecir las tendencias de los tipos de cambio.
Desde 1986, la revista “The Economist” publica periódicamente (dos veces al año) el índice “Big-Mac”. El enfoque teórico del índice Big-Mac se deriva de la teoría de la paridad del poder adquisitivo (PPA) que establece que productos similares, situados en diferentes países, deben tener igual precio (ley de un sólo precio). Es decir, el tipo de cambio debe igualar los precios de una cesta de bienes y servicios en dos países. Si se cumpliese la teoría de la PPA un dólar debería servir para comprar lo mismo, o la misma cantidad de productos, en todos los países del mundo. Sin embargo, esto no siempre ocurre ya que con una misma suma de dinero en algunos países se puede adquirir un volumen físico de bienes y servicios muy superior al que se puede comprar en otros. Los analistas tienden a considerar que esta teoría se cumple en el largo plazo, y, por tanto, es un indicador de la tendencia que seguirá el tipo de cambio en el futuro.
Hay un índice usado para comparar divisas y medir el valor de las monedas. Este índice es el
índice Big-Mac y sencillamente comparar el valor de esta (magnífica) hamburguesa en las diferentes partes del mundo. Este índice toma como premisa que los costes del Big-Mac son los mismos en todas partes, en las mismas cantidades y que por lo tanto el precio final es comparable. Más de 3000 puntos de venta y presencia en 120 países avalan este dato. Podéis ver más información sobre esto en este artículo de
Rafael Pampillón.
Ayer publicaba
El Mundo algo parecido a este índice, pero lo que se representaba era el aumento del coste de un Big-Mac en España. La siguiente imagen muestra el aumento en el precio de los ingredientes de la hamburguesa. Una vez más, lo relevante no este dato concreto sino su extrapolación a la situación general.
Imagen del artículo del periódico El Mundo, 25 junio 2008A tener en cuenta también que estos son precios para McDonnalds, que tendrá sus proveedores y que como es lógico aplicará una dura negociación con estos. Este poder de negociación no está tan claro en el comprador individual, aunque este dispone a cambio de mayor flexibilidad para el cambio de proveedor.
El índice Big-Mac es un indicador que toma como base el precio de una hamburguesa consumida en los establecimientos McDonald’s en los diferentes países del mundo. El índice Big-Mac sirve para saber si los tipos de cambio de las monedas están bien valorados o si, por el contrario, están infravalorados o sobrevalorados. Es decir, el índice ofrece una guía para saber si una divisa se encuentra en su paridad “correcta” o no. Ello se debe a que el tipo de cambio entre dos monedas está en equilibrio cuando el precio de dos cestas idénticas, compuestas por determinados bienes y servicios, es igual en los dos países. El índice Big-Mac supone que una hamburguesa Big-Mac de los establecimientos McDonald’s es una cesta de bienes representativos, ya que mantiene unas características similares a nivel internacional. El que se comercialice en 3000 establecimientos de 120 países usando los mismos ingredientes, hace posible comparar los precios de los países a nivel mundial. El precio base es siempre el de EEUU y se obtiene como promedio de cuatro ciudades americanas (Atlanta, Chicago, Nueva York y San Francisco).
Indice del 14 de octubre de 2010